De cómo el herrero yerra sin (o por) querer.

Dice el refrán que "en casa del herrero cuchara de palo", señalando que suele faltar alguna cosa en el lugar donde sería natural o fácil que ésta estuviera, y me parece a mí que la explicación a esta verdad absoluta se encuentra muy relacionada con la Psicología, concretamente con la "Terapia no directiva" del humanista Carl Rogers y con otro "lema" que yo, no sé si original o involuntariamente plagiado, he creado: "El sentimiento nubla la razón".

Bien, a continuación os pondré en un supuesto que seguramente os resulte familiar, de hecho durante algún tiempo fue una cita que recorría las redes sociales y nicks de MSN al más puro estilo: "si X te vacila, tú (X2) te callas y lo asimilas" pero en este caso, era algo así como "soy psicolog@ de mis amigos y luego no soy capaz de arreglar mis propios problemas".

No es sencilla la deducción a la que llegué, probablemente no logre transmitirla completamente solo con este texto, pero os intentaré explicar está problemática tal y como yo la veo. En muchas ocasiones alguien que está pasando una mala racha (y con el que nuestra relación no es nada del otro mundo) viene y nos cuenta sus problemas, y nosotros (con más o menos interés) lo escuchamos y lo invitamos a que lo suelte o vomite todo mientras nosotros les prestamos atención y asentimos y/o los invitamos incluso a llorar si lo necesitan. y poco más... Esta situación suele terminar con la persona de la mala racha un poco más animada u optimista. La "Psicología no directiva" de Rogers, es algo parecido a esto, de ahí su nombre, el psicólogo "no dirige", es el paciente el que lo hace. (Este supuesto, hablando en los términos del refrán, sería la casa de cualquiera menos la del herrero)

Qué es lo que pasa en casa del herrero? o sea, en la tuya (entiéndase casa por el circulo de personas que te duelen, incluida tú, porque tú te dueles no?, o si te das un porrazo en el "deo mariquichi" con la pata del sillón le duele a otro?)...
Si tú, querido herrero, tienes la oportunidad de sufrir el cómo tu hermano, tu madre, tu hijo, tu mejor amigo o tu pareja pasa por una racha depresiva, o algo parecido, tu "sentimiento" nublará tu "razón" y el daño que te hace la situación de un ser querido, no te permitirá actuar del modo "no directivo" en que lo hiciste antes e involuntaria e impepinablemente caerás en el ERROR de "amo a ve tu lo que tienes que hace es X" o el también conocido como "bueno ill@ pero no mires lo negativo namás", o en el CRIMEN de "joder, es que no sé que más decirte ya para que te animes...".

Esta situación termina con tu ser querido sintiéndose mal por amargarte a ti también, y contigo sumido en una insoportable impotencia por no poderle ayudar. Es entonces cuando puedes llegar a pensar: "joder, a tol mundo le sirve hablar conmigo, y luego a los que yo quiero no les sirves pa ná", o sea, es entonces, cuando se plasma el refrán que originó la reflexión de hoy Domingo, "en casa del herrero, cuchara de palo". Y el fallo ha sido ese compadr@, tu implicación emocional, tu madre, hermano, pareja o tu mejor amigo o tu hijo, necesitaban LO MISMO que aquella persona del supuesto anterior, la cuál quizás no te dolía tanto y a la que sí ayudaste mucho.

Compadr@ si tú estás mal por X, te la suda que los pajaritos canten y que las nubes se levanten, porque tu estás o tienes X, y solo quieres hablar de X, quejarte por X y llorar por X, y ésa es la única manera de salir de X o superar X. Yo con toda mi buena intención intento mostrarte las otras 26 letras del abecedario, pero no te ayudo. Al igual que tampoco te ayuda una borrachera, ni un porro, pero de las drogas y mi experiencia con ellas os hablaré la próxima vez, si le dáis a me gusta a ésto, si no pos me compraré un amigo por mi cumpleaños y le contaré mis garrapatadas a él.

PD1: Ten en cuenta al Herrero, a Rogers y al Garrapa para la próxima vez que te veas en ésta situación.

PD2: El título de la entrada es una puta genialidad jeje